EL LABERINTO DE LA AUTO-ESTIMA
¿Y si la “auto-estima” es mentira?
Cuando echas un segundo vistazo en tu propia experiencia, es imposible encontrar tal «cosa» como una auto-estima.
Si pudiéramos encontrarla, tendríamos que poder hacer alguna analítica empírica, como cuando te mides la vitaminaD en sangre.
Si te mides la sangre, verás cláramente si tienes baja la vitaminaD.
En cambio, con la auto-estima, no hay ningún test así.
Porque no existe.
Es una construcción mental que nos inventamos.
Vivimos algo que nos dis-gusta, y decimos: “tengo la auto-estima baja”.
El problema es que esa afirmación esconde una puerta que, si la pasas, entrarás en un laberinto de angustia permanente. Un laberinto donde nunca terminarás de tener la auto-estima tranquila, porque siempre te faltará una alabanza nueva, un logro más grande, y un futuro mejor.
¿Si estás fatal un día no te mereces aceptarte tal y cómo estás en ese momento?
Ser humano ya es difícil de por sí.
Prefiero no meterme en el laberinto de la estima dependiente. Por sus trampas resbaladizas.
Una de esas trampas es creer que puedes sentir “conceptos” tales como una “auto-estima”.
En el nivel de la NEO experiencia (lo que notas, escuchas y observas en primera persona) sólo puedes experimentar imágenes, sonidos y sensaciones. No puedes sentir una “auto-estima”. En todo caso puedes experimentar tu voz interna diciendo con un tono agresivo y gritón alguna frase como…
… “¡no vales para nada!”.
Pero eso no es un “auto-estima” hablando. Es una voz que ETIQUETAS como “auto-estima”.
¿Y qué problema tiene eso?
Que así alejas tu mente de la realidad, y la acercas a la locura.
Porque no puedes sentir conceptos.
Y cuando crees eso, sufres.
Para mi, la mejor forma de salir de este “laberinto” imaginado es a través de 2 comprensiones:
- Despierta de Tu Auto-Hipnosis
Cada vez que te crees frases como “tengo una auto-estima baja o alta” estás auto-hipnotizándote con tu lenguaje. Estás convirtiendo mentalmente un proceso vivo y cambiante (tu experiencia) en algo que está ahí quieto dentro de tu cerebro (mentira).
Si realmente crees que tienes una “auto-estima”, te reto a encontrarla en tu propia experiencia (no en tus conceptos). Si la buscas bien, lo único que encontrarás serán movimientos corporales, imágenes y sonidos. Pero ninguna “cosa” llamada auto-estima.
- Colega Incondicional
Estés donde estés (en las “mazmorras” del sufrimiento o en el “edén” de la iluminación) ámate.
Yo prefiero la ruta que propuso Albert Ellis con su U.S.A. (Unconditional Self Acceptance o en español: Auto-Aceptación Incondicional).
Sé tu colegón incondicional.
Conecta con esa parte de ti que no juzga, no alaba, no premia y mucho menos te «diagnostica» con «auto-estimas altas ni bajas».
Conecta con esa parte que sólo acepta.
¿Cómo?
Simplemente experimentando tu experiencia.
Simplemente Notándote, Escuchándote y Observándote.
Sin inventarte historias macabras sobre supuestas “Auto-Estimas” bajas.
Sí, es difícil, al principio. Pero más difícil es vivir en una Rueda de Ratón donde corres y corres hacia nuevos logros vacíos, sin llegar nunca a esa paz que ansías.
Si quieres profundizar en esto, entrenando tu cuerpo<>mente<>emoción con mis experimentos guiados, puedes entrar por esta puerta sin laberintos.
Íñigo