El pensamiento crea el mundo y luego dice “yo no he sido”
Una cita reveladora de David Bohm, físico cuántico.
Las circunstancias no crean tus sentimientos.
¿Cómo? ¿Estás loco, Íñigo?
Tan loco como para experimentar – abierto de mente – con nuevos paradigmas.
Si te atreves a cuestionar tus percepciones, encontrarás una verdad revolucionaria para la psicología.
La frase de tu amigo no genera tu enfado.
La mirada del público no genera tu miedo.
La foto de instagram no genera tu tristeza.
La cuenta de banco no genera tu estrés.
PARECE que es así.
Realmente se SIENTE así.
Pero si aprendes a echar un segundo vistazo, descubrirás algo nuevo.
Descubrirás una “ilusión psicológica” que multiplica el proceso de preocupar, obsesionar, tensar y deprimir.
Lo que genera nuestros sentimientos, es el significado que proyectamos en las “circunstancias”.
La historia Sufí del «Efecto Farola» lo cuenta con gracia:
Un policía ve a un hombre borracho buscando algo bajo una farola y le pregunta qué ha perdido el borracho. Él dice que perdió sus llaves y ambos miran juntos bajo la farola. Después de unos minutos, el policía pregunta si está seguro de que los perdió aquí, y el borracho responde que no, y que los perdió en el parque. El policía pregunta por qué está buscando aquí, y el borracho responde: «aquí es donde está la luz».
Vivimos inmersos en una ilusión persistente desde hace siglos. Un malentendido mental que nos hace sufrir por estar mirando en el lugar equivocado.
Si quieres aprender una nueva forma de mirar, en nuestros sistemas te entrenamos para transformar tu percepción.
Porque, cuando nuestra percepción cambia, el mundo cambia.
Pero si tu percepción sigue igual, no importa cuantos “arreglos” hagas fuera de ti.
La puesta de sol podrá estar «idílica y preciosa», pero uno se seguirá sintiendo angustiado y triste.
El pensamiento proyecta significados macabros en lo que uno va viviendo, y luego dice…
“Te sientes así por culpa de la circunstancia X. ¡Yo no he sido!”.
Íñigo