Hoy una Navegante ha colgado esto en nuestra comunidad privada de Como En Casa:
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¿Y si sólo soy?
Sin más y lo es todo.
«Soy» sin adjetivos ni sustantivos.
El resto han sido añadidos que se me han pegado y en esencia no soy.
PD Me alivia este reseteo de ser yo en esencia lo quiero ser y soy de verdad. Sin históricos.
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Puede que ese texto a alguno le parezca un parloteo filosófico sin utilidad práctica para sufrir menos.
Pero sé que esta persona, gracias a su trabajo meditando, está entrando en contacto con algo liberador.
Para mí, el alivio más profundo es este:
Reconocer que únicamente eres.
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Soy. Luego etiqueto.
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Esto a algunos les podrá sonar extravagante y esotérico. Pero muchos científicos escépticos (como Gary Weber o Sam Harris) llevan años demostrando cómo el Ego es una ilusión (y los Maestros de meditación llevan siglos, pero ahora tenemos herramientas científicas más prácticas para la vida cotidiana, no tan filosóficas abstractas).
El Ego es una ilusión que a veces resulta inofensiva…
… y otras veces fomenta el sufrimiento psicológico.
Ahora…
¿Y si dejas de tomarte tan en serio las etiquetas?
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¿Y si… de vez en cuando… abandonas la lucha… y simplemente *eres*?
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Podemos usar etiquetas como recurso para el día a día. A veces resultan prácticas.
Ejemplos -> soy Íñigo… soy español… soy emprendedor… soy creativo.
Aunque, fíjate:
Puedo transformar ese lenguaje aparentemente inofensivo, por algo más real.
No *soy* Íñigo, me llaman Íñigo.
No *soy* español, nací en España.
No *soy* creativo, expreso creatividad.
Soy. Luego etiqueto.
Efectivamente, esto es fácil entenderlo con la cabeza (aunque no descartes empezar a practicar esa forma diferente de lenguaje… sin el «soy X o Y»… porque podrías empezar a reestructurar tu cerebro de maneras liberadoras. Tú pruébalo en tu propia experiencia, ya verás…).
Para un entrenamiento más a fondo y sistematizado, aquí debajo tengo un método de desarrollo personal, en mi newsletter diario.
Íñigo Lacasa